Si buscas hosting web, dominios web, correos empresariales o crear páginas web gratis, ingresa a PaginaMX
Por otro lado, si buscas crear códigos qr online ingresa al Creador de Códigos QR más potente que existe


Ideologías
-Socialismo Revolucionario-

El socialismo es el control por parte de la sociedad organizada como un entero sobre todos sus elementos integrantes, tanto los medios de producción como las diferentes fuerzas de trabajo aplicadas en las mismas.1 El socialismo implica, por tanto, una planificación y una organización colectiva y consciente de la vida social y económica.2 Subsisten sin embargo criterios encontrados respecto a la necesidad de la centralización de la administración económica mediante el Estado como única instancia colectiva en el marco de una sociedad compleja,3 frente a la posibilidad de formas diferentes de gestión descentralizada de la colectividad socialista, tanto por vías autogestionarias como de mercado. Existen también discrepancias sobre la forma de organización política bajo el socialismo para lograr o asegurar el acceso democrático a la sociedad socialista a clases sociales o poblaciones, frente a la posibilidad de una situación autocrática por parte de las burocracias administrativas.

Las formas históricas de organización social de tipo socialista pueden dividirse entre determinadas evoluciones espontáneas de ciertas civilizaciones de carácter religioso y las construcciones políticas establecidas por proyectos ideológicos deliberados. De éstas se destacan, respectivamente, el Imperio Inca4 y la Unión Soviética.
 
Por extensión se define como socialista a toda doctrina o movimiento que aboga por su implantación. Frecuentemente coexisten diferentes movimientos políticos que adoptan el título de Socialismo: desde aquellos con vagas ideas de búsqueda del bien común e igualdad social, hasta los proyectos reformistas de construcción progresiva de un Estado socialista en términos marxistas, o las variantes pre y post-marxistas de socialismo (sean obreristas o nacionalistas), o al intervencionismo, definiciones de socialismo o de sus métodos que pueden variar drásticamente según varíen los interlocutores políticos y que algunas veces se distancian en mayor o menor medida de su etimología: estatistas, nacionalistas, marxistas, cooperativistas, corporativistas gremiales clásicos, corporativistas de Estado o fascistas, socialistas de renta, socialistas de mercado, mutualistas, socialdemócratas modernos, etc.

El socialismo continúa siendo un término de fuerte impacto político, que permanece vinculado con el establecimiento de un orden socioeconómico construido por, para, o en función de, una clase trabajadora organizada originariamente sin un orden económico propio, y para el cual debe crearse uno público (por vía del Estado o no), ya sea mediante revolución o evolución social o mediante reformas institucionales, con el propósito de construir una sociedad sin clases estratificadas o subordinadas unas a otras; idea esta última que no era originaria del ideario socialista sino del comunista y cuya asociación es deudora del marxismo-leninismo. La radicalidad del pensamiento socialista no se refiere tanto a los métodos para lograrlo sino más bien a los principios que se persiguen.

 
-Capitalismo Monopólico-

Convenio, unión o agrupación de capitalistas que concentran en sus manos una gran parte de la producción y de la venta de mercancías con el fin de asegurarse elevadas ganancias monopolistas. Surge el monopolio cuando la producción y el capital alcanzan un elevado nivel de concentración. Al convertirse el capitalismo premonopolista en imperialismo (ver), a finales del siglo XIX y comienzos del XX, los monopolios capitalistas empezaron a influir de manera decisiva en la economía y en la política de los países capitalistas. Las formas más simples de monopolio son los "corners", "rings", "pools" y convenciones todos ellos asociaciones fundadas en acuerdos a corto plazo concernientes sobre todo a la esfera de la circulación; se dedican a la compra de ciertas mercancías con el fin de revenderlas a precios más elevados y obtener ganancias monopolistas y dejan de existir al vencer el plazo del acuerdo. Constituyen formas más desarrolladas de monopolio, los cártels, los sindicatos, los trusts y los consorcios. Los capitalistas que forman parte de un cártel y producen artículos homogéneos, con el fin de obtener superganancias se reparten los mercados de venta, establecen de común acuerdo altos precios de monopolio, mas conservan la independencia comercial y de producción. Los sindicatos efectúan conjuntamente la venta de mercancías y la compra de materias primas; las empresas de los capitalistas aislados, conservan la independencia de producción, mas pierden la independencia comercial. Los trusts unifican la actividad comerciar y productiva de las empresas. Los capitalistas que entran en el trust pasan a ser socios o accionistas del mismo y se subordinan a una dirección única. Los consorcios abarcan conjuntos de empresas heterogéneas, compañías enteras en diversas esferas de la economía sobre la base de la dependencia general respecto a un determinado grupo de la oligarquía financiera (ver). En el período del tránsito al imperialismo, en los países capitalistas de Europa Occidental se dieron como característicos los cártels y los sindicatos en los Estados Unidos alcanzaron además, amplio desarrollo los trusts y consorcios; en la Rusia prerrevolucionaria, la forma característica de los monopolios fueron los sindicatos. En la actualidad, en todos los países capitalistas los trusts y los consorcios constituyen las formas de monopolio dominantes. Con el fin de obtener elevadas ganancias, los monopolios utilizan al Estado burgués, convertido en comité de administración de la burguesía monopolista (ver Capitalismo monopolista de Estado). En el seno de los monopolios y entre ellos, se sostiene una encarnizada lucha competitiva por obtener elevadas ganancias monopolistas. Con frecuencia ello conduce a la desintegración de las agrupaciones monopolistas a la absorción de los débiles por los monopolistas más fuertes. El dominio de los monopolios acentúa la anarquía de la producción capitalista, destaco más aun el parasitismo y la descomposición del capitalismo, ahonda las crisis económicas agudiza la lucha de clases en la sociedad burguesa así como el movimiento de liberación nacional de los pueblos coloniales y dependientes contra el imperialismo. Por otra parte, los monopolios capitalistas socializan en alto grado el trabajo y la producción en el marco de la propiedad privada capitalista sobre los medios de producción con lo cual preparan las premisas objetivas de la revolución socialista (ver "Integración", Uniones monopolistas de Estado internacionales).
© 2025 Revista Digital "El Nuevo Orden Internacional"